Rusia afirmó que la anexión de cuatro territorios ucranianos en el este y sur del país vecino le permitirán aumentar entre un 6 % y 20 % la producción de metales, carbón, granos y girasol, según el Ministerio de Desarrollo Económico.
«La incorporación de nuevos territorios en la Federación Rusa permitirá garantizar un aumento en los indicadores nacionales en sectores tan importantes como la industria metalúrgica (en un 20 %), el sector del carbón (en un 6 %), la producción de cereales (en más del 10 %) y el girasol (más de 20%)», señaló la cartera.
Rusia selló hoy formalmente la anexión de las regiones orientales de Lugansk y Donetsk, en el Donbás, una zona conocida históricamente por sus minas de carbón, y de las provincias sureñas de Zaporiyia y Jersón, con acceso a los mares de Azov y Negro y también con una importante producción industrial y de granos.
El presidente ruso, Vladímir Putin, promulgó este miércoles las leyes de anexión de estos cuatro territorios ucranianos, aún no controlados totalmente por Rusia y actualmente objeto de una importante contraofensiva del Ejército de Kiev.
El Ministerio ruso de Desarrollo Económico estima además que el Producto Interior Bruto (PIB) de las nuevas regiones alcanzará los tres billones de rublos (unos 50 mil millones de dólares) dentro de cinco años.
Los tratados establecen que la lengua oficial en las nuevas regiones de este país será el ruso, aunque se permitirá el empleo del ucraniano, y la moneda nacional, el rublo.
Mantendrán su nombre como nuevos entes de la Federación de Rusia, tanto las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk como las regiones de Jersón y Zaporiyia.
El periodo de transición para la plena incorporación de los territorios en Rusia se extenderá hasta el 1 de enero de 2026.