En su colaboración para Laberinto titulada “La ciencia en México, al filo de la navaja”, el doctor Antonio Lazcano Araujo hacía referencia en noviembre del año pasado a los avances científicos y tecnológicos que se dieron a fines del siglo XIX y que “irrumpieron en forma irreversible en la vida cotidiana con la vacunación, la luz eléctrica, el telégrafo, los rayos X y el cinematógrafo”.
La ciencia, agregaba el científico especializado en biología evolutiva, “pronto se convirtió en un elemento indispensable para el bienestar social”, para luego afirmar que “como lo demuestra la pandemia y la crisis sanitaria que estamos padeciendo, la investigación científica juega un papel central en nuestra vida individual y colectiva”.
Sin embargo, advertía el profesor e investigador, integrante de El Colegio Nacional, “el gobierno del presidente López Obrador le ha dado la espalda a esta realidad. El arrinconamiento presupuestal y mediático es un indicador de la contracción brutal que está sufriendo el aparato científico, y refleja la incapacidad gubernamental para entender el significado social, cultural y económico del trabajo académico”.
Más adelante afirmaba que “en nuestro país, educación superior y desarrollo científico van de la mano, pero uno de los mayores obstáculos que tienen que enfrentar es la ausencia de políticas de financiamiento con candados presupuestales que permitan su desarrollo más allá de las ocurrencias políticas, los caprichos sexenales y las crisis económicas.
El apoyo a la ciencia no es una dádiva, sino una obligación del Estado y la sociedad para garantizar la frescura intelectual, la estabilidad laboral y la garantía de becas y salarios dignos que permitan y promuevan el crecimiento y la renovación de la comunidad científica”. Invitado por la Red Universitaria de Jalisco, Lazcano Araujo ofrecerá la charla “Política: el mayor reto de la ciencia mexicana” a través de Facebook el sábado 29 de mayo a las 17:00 horas.
En su charla se referirá también al empeño que ha tenido el actual gobierno en concentrar la capacidad de decisión científica en el Consejo Nacional para la Ciencia y la Tecnología, lo que escribió en su artículo “no sólo entraña el riesgo de la endogamia ideológica, sino que también implica un intento por destruir la evaluación de pares, que históricamente es parte esencial del proceso de independencia del conocimiento científico de los poderes religiosos y políticos”.