Para evitar que particulares construyan sus viviendas al pie de la playa y al hacerlo prohíban o limiten el paso de otras personas a las playas pero también a las cercanías de lagos, esteros y lagunas, las comisiones de Gobernación y Estudios Legislativos en el Senado de la República aprobaron reformas para garantizar el paso libre por estas zonas.
El dictamen que aprobaron reforma la Ley General de Bienes Nacionales, y busca «asegurar que los ciudadanos tengan libre acceso, uso y disfrute gratuito de las playas del país«.
La reforma adiciona una faja de 10 metros a las playas marítimas, a partir de la pleamar hacia tierra adentro. También se modifican los límites de la Zona Federal Marítimo Terrestre, para reducir a 10 metros su extensión de ancho de tierra firme, en función de los nuevos límites de las playas marítimas.
«Estos cambios contribuyen a otorgar claridad a las disposiciones normativas en la materia, así como a restituir a la ciudadanía mexicana el ejercicio pleno de su soberanía sobre el uso y disfrute de sus playas».
Además, complementan el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, el pasado 21 de octubre, que señala que el acceso a las playas mexicanas no podrá ser obstaculizado ni restringido.
Se establece que los 10 metros que se contemplan para las playas, también aplique para los lagos, lagunas y esteros porque también ahí surgen los mismos problemas de particulares que privatizan el acceso a las playas públicas
Señala que el sistema jurídico determina que las playas mexicanas son públicas, de libre acceso y uso gratuito; sin embargo, en la realidad ha sido un derecho coartado a los ciudadanos.