La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) actualizó sus perspectivas de crecimiento económico para México y estima que se presentará una desaceleración, al pasar de un aumento del Producto Interno Bruto (PIB) de 1.9 por ciento en 2022 a otro de 1.1 por ciento en 2023.
De acuerdo con información de la Cepal, para las economías de América Central y México, el bajo dinamismo de Estados Unidos, principal socio comercial y primera fuente de remesas de sus países, afectará tanto al sector externo, como al consumo privado.
En este caso, sin embargo, los menores precios de los bienes básicos actuarían a favor en tanto varias economías que son importadoras netas de alimentos y energía.
Perspectivas para América Latina y el Caribe
La desaceleración esperada para la economía mexicana está en línea con la tendencia que presentará América Latina y el Caribe, pues la región pasará de un incremento del PIB en 2022 de 3.2 por ciento a otro de 1.4 por ciento en 2023.
Para América Latina y el Caribe, en conjunto, el organismo dependiente de Naciones Unidas indicó que en 2023, los países de la región se verán nuevamente enfrentados a un contexto internacional desfavorable, en el que se espera una desaceleración tanto del crecimiento, como del comercio global, tasas de interés más altas y menor liquidez global.
En lo interno, añadió, los países de la región enfrentarán nuevamente en 2023 un complejo entorno para la política fiscal y monetaria.
En lo monetario, precisó, el aumento de la inflación condujo a los bancos centrales, al igual que en la mayor parte del mundo, a aumentar las tasas de política,en algunos casos de manera sustancial, y a reducir el crecimiento de los agregados monetarios.
La Cepal apuntó que si bien se prevé que en 2023 este proceso llegue a su fin, en la medida que se vayan anclando las expectativas de inflación en los países, los efectos de esta política restrictiva sobre el consumo privado y la inversión estarán presentes durante 2023.
Del lado fiscal, abundó, permanecerán altos los niveles de deuda pública en un gran número de países, en un contexto de altas demandas por gasto público, se requerirán medidas para fortalecer la sostenibilidad fiscal y ampliar el espacio fiscal mediante el fortalecimiento de los ingresos públicos.