El Comité de Derechos Humanos de la ONU concluyó que se violó el derecho del ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, a ser juzgado por un tribunal imparcial en la operación anticorrupción Lava Jato. El órgano de 18 expertos independientes, con sede en Ginebra, analizó una queja que había presentado la defensa del izquierdista, quien fue presidente entre 2003 y 2010.
«El Comité considera que (…) los hechos ocurridos (…) demostraron que no se cumplía el elemento objetivo del requisito de imparcialidad», según la decisión, no vinculante.
Los expertos de la ONU concluyeron que también fueron atropellados los «derechos políticos» y a la «privacidad» de Lula, quien fue investigado en la operación anticorrupción Lava Jato a partir de 2016 debido a su supuesto involucramiento en dos casos de desvíos de fondos en la petrolera estatal Petrobras.
«Es una victoria para cada brasileño que cree en el estado de derecho y la democracia. Jueces internacionales independientes e imparciales escucharon todas las pruebas y llegaron a la conclusión de que el juez Moro estaba completamente sesgado en mi contra«, celebró Lula, en una nota enviada por su asesoría de comunicación.
El Comité de Derechos Humanos destacó que el entonces juez Sergio Moro, quien sometió a juicio a Lula en primera instancia, fue parcial en el trámite y que sus declaraciones y las de los fiscales violaron el derecho a la presunción de inocencia.
Hoje eu estou feliz, a decisão do tribunal da ONU lavou a minha alma. E eu só quero que a imprensa, que divulgou tantas mentiras sobre mim, peça desculpas e admita que foi enganada por Moro e Dallagnol.
— Lula (@LulaOficial) April 28, 2022
«Hoy estoy feliz, la decisión de la corte de la ONU me lavó el alma. Y solo quiero que la prensa, que difundió tantas mentiras sobre mí, se disculpe y admita que (Sergio) Moro y (el ex procurador de la República, Deltan) Dallagnol les mintieron», dijo Lula da Silva en su Twitter.
Moro, quien luego fue por 15 meses ministro de Justicia del presidente Jair Bolsonaro, condenó a nueve años de prisión a Lula en julio de 2017, y al año siguiente, la pena fue aumentada a 12 años por una corte de apelación. En abril de 2018 Lula comenzó a cumplir pena en una prisión en Curitiba, donde estuvo 580 días, hasta noviembre de 2019.
Lula recuperó sus derechos políticos en marzo de 2021, cuando un juez del Supremo Tribunal Federal (STF) anuló las condenas por anticorrupción. Este año, el líder del Partido de los Trabajadores será candidato en la elección de octubre para intentar convertirse por tercera vez en presidente.
«Aunque el STF anulara la condena y la prisión de Lula en 2021, esas decisiones no fueron suficientemente oportunas y efectivas para evitar o reparar las violaciones», dijo Arif Bulkan, miembro del Comité.
Una «decisión histórica», dice su abogado
Distintas encuestas muestran a Lula como favorito frente a Bolsonaro para las elecciones, aunque los últimos sondeos muestran que el presidente ha recortado la distancia.
«Es una decisión histórica. Una victoria no solo de Lula, sino de todos aquellos que creen en la democracia y en el Estado de derecho«, dijo Cristiano Zanin Martins, abogado de Lula, en una conferencia de prensa este jueves.
Por su parte, Moro dijo en una nota enviada a la agencia AFP que todavía no había tenido acceso al informe de la ONU, pero destacó que Lula «fue condenado por corrupción en tres instancias» del Poder Judicial y que los procesos pasaron «por las manos de más de 9 jueces».
El Comité de la ONU instó a Brasil a asegurar que otros procedimientos criminales pendientes contra Lula cumplan las garantías a un «debido proceso legal» para prevenir «violaciones semejantes» en el futuro.