Luego de las fuertes lluvias y la caída de granizo ayer en la Ciudad de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que tanto la Secretaría de Cultura como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se encuentran revisando los posibles daños al Templo Mayor, luego de que se derrumbara el techo que protege el recinto.
“Estuvo muy fuerte la lluvia y la granizada en el centro. Se derrumbó una techumbre en el Templo Mayor, ya está atendiendo este asunto tanto la Secretaría de Cultura como el INAH. Desde anoche están trabajando para ver si no hubieron daños a los templos”, dijo.
Durante su conferencia mañanera, el mandatario apuntó que los expertos están poniendo especial atención en el Templo de las Águilas, pues fue donde ocurrió el incidente. Además, están haciendo una revisión y se reparará o, en dado caso, renovará el techo junto con los arqueólogos “Si se presentaron daños se tiene que llevar a cabo la reconstrucción, el trabajo arqueológico es necesario para reparar cualquier daño. Se inundaron los patios con granizo, el Zócalo también se cubrió por completo”, comentó.
Ayer, alrededor de las 20:00 horas, una fuerte lluvia sorprendió a los capitalinos seguida de una granizada. La tormenta provocó afectaciones en el techo de policarbonato del Templo Mayor, el cual colapsó a causa de la acumulación de granizo.
La titular de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México, Myriam Urzúa Venegas, comentó que por la mañana comenzaran los trabajos del retiro de la estructura del techo colapsado. “No hay daños en las ruina del Templo Mayor”, indicó. Ahora, la zona arqueológica se encuentra bajo el resguardo de personal de seguridad, así como de los especialistas que se encargarán de reparar cualquier posible daño.