La empresa Minera Penmont rechazó cualquier vínculo con el asesinato del ejidatario José de Jesús Robledo Cruz y su esposa María de Jesús Gómez Vega del ejido El Bajío, ocurrido el 29 de abril en Puerto Peñasco, Sonora, quienes eran firmes opositores a la empresa subsidiaria del Grupo Peñoles, como lo denunció la Red Mexicana de Afectadas/os por la Minería (Rema).
“Minera Penmont rechaza categóricamente afirmación o insinuación alguna que la vincule de cualquier manera con los actos criminales de este fin de semana. Reprueba cualquier forma de violencia y confía en el sistema de justicia para la resolución de los problemas”, indicó la empresa.
En una tarjeta informativa, la empresa minera reiteró su condena al clima de violencia “que ha propiciado el enfrentamiento entre grupos de algunos ejidatarios y la intervención de grupos criminales en la zona”, por lo que llamó a las autoridades a investigar exhaustivamente.
“Minera Penmont lamenta y condena los asesinatos ocurridos en las últimas horas en Puerto Peñasco, así como la ola de actos delictivos que afectan a Caborca y la región. Conmina a las autoridades a que se investigue hasta sus últimas consecuencias y se haga justicia”, agregó.
En días pasados, la REMA dio a conocer a través de un comunicado que junto con los cuerpos de Jesús Robledo Cruz y su esposa María de Jesús Gómez Vega, fue abandonada una cartulina con amenazas directas en contra de 13 personas defensoras más del ejido, por lo que demandan al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación (Segob) implementar urgentemente las medidas de protección correspondientes.