Fueron liberados tres elementos de la Fiscalía General de la República (FGR), adscritos a la subdelegación de Acapulco, que habían sido retenidos en el municipio de San Marcos por la la Policía Comunitaria de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG).
La FGR aclaró que los agentes realizaban labores de investigación cuando fueron retenidos, una vez que sus superiores confirmaron que habían sido enviados como parte de una pesquisa. «Los ubicamos en la entrada del OXXO de San Marcos y, al llegar vimos, que eran agentes de la PGR (sic), en una camioneta oficial y se les detuvo.
Hay denuncias por extorsión y amenazas, pero nosotros los entregaremos a la Fiscalía General del Estado, porque tienen acusaciones en Cuajinicuilapa, Ometepec, San Marcos, Ayutla de los Libres, y Atoyac de Álvarez», dijo el promotor de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio.
Explicó que la detención ocurrió anoche en la región de la Costa Chica de Guerrero y los trasladaron del municipio de San Marcos a Florencio Villareal, en Cruz Grande. Los tres agentes fueron acusados de extorsión y amenazas por ciudadanos de al menos cinco municipios costeros, al ser víctimas del despojo de dinero desde hace cinco meses.
Según la UPOEG, los elementos fueron detenidos cuando recibían dinero por parte de sus víctimas. Mientras que, en sus teléfonos celulares, presuntamente les encontraron conversaciones de WhatsApp donde pedían a las víctimas depósitos en tarjetas de Saldazo del OXXO.
Los integrantes de la UPOEG grabaron a cada agente para que compartiera su nombre y cargo, donde se presume que aseguraron ser agentes de la subdelegación de la FGR. En la comandancia de la UPOEG quedó retenida también una camioneta Nissan, tipo Frontier Pick Up blanca, con placas del estado de Guerrero.