La estrategia de etiquetado frontal en bebidas azucaradas y comida chatarra contribuirá que en cinco años el sistema de salud ahorre alrededor de 39 mil millones de pesos, aseguró Simón Barquera Cervera, director del Centro de Investigación en Nutrición y Salud (CINS) del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
“Con las etiquetas de advertencia, estimamos que cinco años después de la implementación, podríamos ahorrar potencialmente mil 800 millones de dólares, incluidos 742 millones en costos indirectos”, explicó Barquera Cervera entrevista con MILENIO.
“Estamos una postura a más de 7 mil 500 profesionales de la salud una parte de la agenda de acción, para que después sea analizada como parte de la agenda de acción. Se trata de incluir a la obesidad como una enfermedad compleja, multifactorial y un factor de riesgo para desarrollar otras enfermedades; asimismo reconocer que la mala alimentación detonada por los entornos es la principal causa de su desarrollo”, aseveró.
En México hay 50 millones de mexicanos con problemas de obesidad, y cerca del 48 por ciento de casos de coronavirus en el país se asocian a personas con esta enfermedad. En México, en los últimos 20 años, ha estado aumentando de manera constante la obesidad. La Encuesta Nacional de Salud reportó un incremento de la obesidad de 2018 2019 al pasar del 35.6 al 42.2 por ciento.
“Estudios que hemos hecho en 300 países y a lo largo de 30 años, ninguno ha logrado descifrar los mecanismos para lograr reducciones en las prevalencias de obesidad. Es un problema que está muy asociado al cambio del ambiente alimentario, a la forma en la que comemos y en la forma en la que diseñamos los espacios en los que vivimos“, acotó.
La pandemia de covid-19 tiene efectos importantes en los estilos de vida, entre otras cosas, hay una disminución de la actividad física, un aumento en el consumo de la comida chatarra, una mayor exposición a la mercadotecnia de ésta y aumento en la inseguridad alimentaria creciendo el riesgo de padecimientos crónicos.
En el «Día mundial de Obesidad 2021: juntos y sin estigma», se proyectaron videos donde Cristian Morales, de la Organización Panamericana de la Salud, detalló que México encabeza la lista de países con mayor prevalencia con obesidad, con 35 por ciento en el grupo de 12 a 19 años. “Esto es particularmente grave cuando estamos viviendo una epidemia ¿Por qué? La obesidad está asociada con enfermedades como hipertensión, diabetes, que sabemos a su vez que son factores de riesgo.
En marzo estamos llegando prácticamente a los 200 mil muertos y evidentemente todo lo que hagamos para mitigar el impacto de la pandemia, incluyendo la lucha contra la obesidad, es algo en el que en lo que nos debemos de comprometer fuertemente”, aseveró.
Christian Skoog, representante de la Unicef en México, resulta esencial prevenir las formas de obesidad y mala alimentación. “Una de nuestras prioridades es trabajar por una buena alimentación de niños, la prevención es un pilar muy importante para evitar la triple carga de la mala nutrición que incluye el sobrepeso y obesidad. Trabajamos en transformar entornos que sean favorables para la buena alimentación y la nutrición sean pilares”.
Sin embargo, dijo, sigue habiendo la difusión de publicidad de alimentos altamente calórico dirigidos a niños y hay poca información de alimentación saludable. Además, resaltó la importancia del etiquetado frontal, las medidas de transformación de entornos saludables desde un abordaje académico, ciencia y sociedad civil.
En tanto Martha Kaufer, investigadora del Instituto Nacional de Nutrición, refirió que la obesidad va más allá de un asunto estético, sino a un problema, vinculado a diferentes factores sin estigma.
A su vez, Boyd Swinburn, de la Universidad de Auckland, Nueva Zelanda, celebro que México esté mostrando el camino para tomar acciones y mejorar los ambientes alimenticios, en términos de etiquetado en bebidas azucaradas, productos altamente calóricos. “Esto mejorará las políticas públicas de control de la obesidad, con más políticas alimentarias”.