Debido al aumento en el número de personas migrantes en el territorio de Texas, el gobernador Greg Abbott podría declarar una «invasión» para conseguir poderes de guerra reales para apoderarse de una autoridad estatal mucho más amplia en la frontera, según informa The New York Times.
De esta forma, se estaría cumpliendo con una cláusula de la Constitución de la nación estadunidense que dice que los estados no pueden participar en una guerra, excepto cuando “realmente son invadidos”.
De esta forma, se estaría cumpliendo con una cláusula de la Constitución estadunidense que dice que los estados no pueden participar en una guerra, excepto cuando “realmente son invadidos”.
De acuerdo con The New York Times, los principales abogados del gobernador y del fiscal general de Texas, Ken Paxton, se reunieron este mes para debatir la medida, que pondría al estado en un choque frontal con el gobierno federal al permitir que la policía estatal arreste y deporte a las personas migrantes.
Sin embargo, Greg Abbott expresó preocupación sobre el tema por las consecuencias que este puediese tener, aunque aseguró que aún lo están investigando.
“Si usamos esta estrategia, podría exponer a las fuerzas del orden en el estado de Texas a ser procesadas”, dijo durante una conferencia de prensa, informa The New York Times.
Durante el último año, el gobernador Abbott ha utiliado el flujo migratorio para lanzar el mensaje político de «asumir el papel de defender al país de la migración no autorizada», mientras está en la pugna por su tercera reelección.