Ante la creciente violencia feminicida que vulnera la vida de las niñas y mujeres de Oaxaca y ha causado la muerte de 528 oaxaqueñas, la organización Grupo de Estudios Sobre la Mujer “Rosario Castellanos” (GESMujer) informó que durante el actual sexenio, que aún no concluye, ya se superó la cifra de muertes de mujeres registradas en toda la administración de Gabino Cué Monteagudo que terminó con 527 casos.
“Cada sexenio ha concluido con un saldo indignante de niñas y mujeres asesinadas de manera violenta, al terminar la administración de Gabino Cué con 527 casos había sido la de mayores costos; sin embargo, a la fecha con los dos lamentables feminicidios ocurridos en días recientes, Alejandro Murat supera la cifra antes de concluir su mandato”.
Sobre tema, GESMujer reiteró que las consecuencias de una violencia feminicida afectan a las niñas y mujeres víctimas de la violencia de género, a sus hijas, hijos, madres, familias, comunidades enteras, porque cada una de ella deja, además de un daño irreparable, el dolor y la indignación de exigir justicia frente a un sistema insensible e incapaz, generando una impunidad creciente.
Según el registro de la organización, sólo en los que va de este 2021 se han cometido 33 asesinatos de mujeres, los últimos dos casos se reportaron en las regiones Mixteca e Istmo de Tehuantepec.
De acuerdo con cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de estas 527 mujeres que han sido asesinadas, sólo en 155 casos el delito fue tipificado como feminicidio, mientras que el resto se investigó como homicidio culposo; 12 de esos feminicidios se cometieron hasta el 30 de abril de 2021.
En un pronunciamiento, mencionó que como en el 24% de los casos del 2021, en un lugar despoblado fue abandonado el cuerpo de una mujer con huellas de violencia, esta vez en San Dionisio del Mar. Lo que representa que nuevamente el Istmo de Tehuantepec encabeza los asesinatos violentos de niñas y mujeres en Oaxaca, con el 30%.
“El abandono de cuerpos en lugares despoblados, a la orilla de carreteras, en parajes solitarios, la exposición de sus cuerpos, despojándolas de toda humanidad, es un signo de que la violencia feminicida sigue creciendo en total impunidad”.
La mujer asesinada en San Dionisio del Mar, fue identificada como trabajadora de un bar. Para GESMujer, esto llama a visibilizar el nivel de vulnerabilidad en que se encuentran las mujeres a quienes la sociedad les ha negado oportunidades y a la falta de mecanismos de seguridad en la que desafortunadamente infinidad de mujeres laboran, colocándolas en un grave riesgo para su vida.
El mismo día de este asesinato, en Ojo de Agua, Copala distrito de Juxtlahuaca, la señora G. fue asesinada oor su pareja, quien le disparó en el rostro, frente a sus dos hijos, lo que consideraron que “es otro indignante ejemplo de la violencia feminicida a manos de su pareja”.
Como en el 58% de los casos del 2021 fue asesinada con arma de fuego, precisó, situación que se repite una y otra vez, sin que a la fecha se hayan definido estrategias locales, municipales y estatales para detener esta práctica que está costando la vida de niñas y mujeres en Oaxaca.
“En su propia casa fue víctima de feminicidio la Sra. G., frente a testigos, por lo que demandamos que la justicia sea expedita, que la carpeta de investigación sea integrada por el delito de feminicidio y que se castigue al responsable, de manera que no sea un caso más de impunidad”.
GESMujer expresó que conocen la problemática y saben de la complejidad de acompañar a las mujeres a exigir justicia y de las graves deficiencias de un sistema que debería procurar justicia.
“El fiscal Arturo Peimbert comprometió su palabra, pidió confianza a la ciudadanía, pero la confianza se gana con hechos y desafortunadamente los hechos hablan por sí mismos”, finalizó la organización de la sociedad civil.