Japón registró lluvias torrenciales sobre el oeste de la región, que han causado inundaciones y desprendimientos de tierra. Las autoridades pidieron evacuar a más de un millón de personas, pues se espera que las tormentas continúen durante varios días.
Las autoridades de Hiroshima y de la zona norte de Kyushu pidieron evacuar a la población después de que la agencia meteorológica japonesa JMA anunciara niveles inéditos de lluvia en la región.
Cerca de 1.4 millones de personas fueron exhortadas, aunque no obligadas, a dejar sus hogares, según informaron medios locales. Más de 150 soldados, policías y bomberos participan en las operaciones de socorro. (AFP)
La televisión japonesa mostró a los rescatistas ayudando a residentes, a bordo de botes salvavidas, en calles inundadas por las lluvias en la localidad de Kurume, en Fukuoka, mientras una corriente lodosa afectó la cercana prefectura de Saga.
Una mujer de 59 años murió y dos miembros de su familia están desaparecidos, después de que un desprendimiento de tierra destruyera dos casas en Unzen, en Nagasaki, indicó un responsable local. «Más de 150 soldados, policías y bomberos han sido enviados para participar en las operaciones de socorro», dijo el funcionario, Takumi Kumasaki.
Agregó que están buscando a las personas desaparecidas y monitorean posibles deslizamientos de tierra.
En tanto, continúan cayendo fuertes lluvias y se espera que continúen durante varios días en gran parte de Japón. Hasta el momento, se reporta una persona muertas y dos desaparecidas tras las lluvias en Japón.
A principios de julio, las intensas lluvias provocaron un enorme deslizamiento de tierra en la estación balnearia de Atami, a unos 100 kilómetros al oeste de Tokio, causando muertes y desapariciones.
Según los científicos, el cambio climático ha generado una atmósfera más cálida que retiene más agua, lo que incrementa el riesgo de intensas precipitaciones. «Se han registrado niveles de precipitación sin precedentes.
La alerta máxima es necesaria, incluso en regiones donde el riesgo de deslizamientos de tierra e inundaciones generalmente no es tan alto», dijo Yushi Adachi, un funcionario de la JMA, en una conferencia de prensa en Tokio.
En julio de 2020, las inundaciones récord en el suroeste de Japón dejaron un saldo de más de 80 personas muertas y desaparecidas. Dos años antes, más de 200 personas murieron en grandes inundaciones al oeste del país.