El diputado de Guerrero con licencia, Jorge Salgado Parra, informó que establecerá una tregua política y que no disputará en los tribunales la candidatura de la coalición PRI-PRD a la alcaldía de Chilpancingo, en aras de no afectar el “proyecto mayor” que representa la gubernatura del estado.
«Yo no quiero que me culpen de poner en riesgo un proyecto mayor”, enfatizó. En un encuentro con integrantes de la estructura que acompañó su proyecto al seno del PRI, Salgado Parra estuvo acompañado por su esposa, Alondra Marroquín, su padre Jorge Salgado Leyva y su hermano Raúl, en un salón de fiestas ubicado en la parte sur de la ciudad.
La reunión, que inicialmente estuvo convocada para el martes 20 de abril, se concretó hasta la tarde de este jueves, en ella habló a grandes rasgos de su formación académica en México y en el extranjero, así como del trabajo que ha desplegado en la capital de Guerrero desde hace más de una década.
“Me queda la satisfacción de haberle cumplido a mi pueblo con firmeza y entereza indeclinable, pero los nuevos tiempos electorales nos animaron para participar legítimamente por la presidencia municipal de Chilpancingo, consciente de que siempre he sido partidario de un juego justo y equitativo, con la definición de reglas totalmente claras”, señaló.
Y agregó: “jamás pensé que en el manejo de las alianzas políticas pudieran prevalecer las malas prácticas, los arrebatos ni los acuerdos sorpresivamente ventajosos y arbitrarios. A mi en ningún momento, lo quiero decir abiertamente, nunca me enseñaron un acuerdo político en donde el PRI y el PRD tuvieran ese acuerdo por Chilpancingo, nunca lo vi, nunca me lo enseñaron y siempre me lo negaron”.
Población, educación y seguridad: radiografía de Guerrero rumbo a elección 2021 Por esa razón, dijo que su estructura siempre lo vio trabajar por la candidatura a la presidencia municipal y nunca por otro tipo de proyecto. Recordó que en términos jurídicos, él es el único candidato a la presidencia municipal, propietario por el PRI para Chilpancingo, en tanto que en la alianza, quien registra candidato a la alcaldía es el PRI, lo que legalmente le favorece.
Sin embargo, ante la posibilidad de ir a una controversia ante el Tribunal Electoral del Estado, señaló que no lo hará para no afectar el proyecto mayor, que es la elección de gobernador. “Yo no he hecho ningún arreglo de nada, lo que hago es ponderar a Guerrero y Chilpancingo, porque podría meterme al juicio, tumbar la candidatura y que me la regresen, pero lo hemos meditado y no afectaremos intereses superiores, que son los de Guerrero y de Chilpancingo”, indicó.
Insistió en el hecho de que su decisión es producto de una profunda reflexión para declarar que “tomaremos una tregua en la actividad política, para esperar mejores tiempos y dar paso a que las ambiciones desmedidas tomen su curso, pero además, que la gente se pueda dar cuenta de qué pasó, como pasó y en donde pasó”. Incluso, para que la gente se dé cuenta de “donde está el perfil ganador”.
Reconoció que la política es pasión, pero también es paciencia y serenidad. Reiteró que su lealtad es con la gente de Chilpancingo y en varias ocasiones dijo a los integrantes de su estructura: «Yo no he acordado absolutamente nada, soy un hombre responsable”.