La jueza de control, Iris Peralta Salvador, retrasó dos días el cateo de cinco ranchos de la Familia Michoacana, ubicados en los municipios de Iguala, San Miguel Totolapan y Arcelia, acusó el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía.
Pese a que estos hechos ocurrieron en julio, el funcionario consideró que, de no haberse diferido la investigación, se pudo haber evitado la masacre en Tololapan, que dejó un saldo de 20 personas asesinadas.
“Cuando se realizaron los cateos ya fueron inoportunos, y ya los criminales, presuntos, ya no habían dejado ninguna evidencia. Tiempo después viene el homicidio, que se quiso simular que fue un presunto accidente de Nazario N, director de Desarrollo Rural en San Miguel Totolapan, y con posterioridad, el día 5, hubo el evento de todos conocido en San Miguel Totolapan.
Detalló que el pasado 26 de julio, acciones de inteligencia permitieron ubicar cinco posibles inmuebles donde el grupo criminal de La Familia Michoacana desarrollaba actividades presuntamente delictivas, entre ellas la privación ilegal de la libertad de personas.
Las autoridades solicitaron el cateo, formulado en términos de ley, según Mejía, debidamente fundada y motivada.
“Se le niega en un primer momento la solicitud de cateo, después de nuevas gestiones de parte del Ministerio Público y, al insistir, dos días después, la jueza Isis Peralta, juez de Control en el estado de Guerrero, autoriza finalmente el cateo”, explicó.