Son ocho niños y ocho adultos
De acuerdo con el avance del análisis contextual y bioarqueológico, realizado por personal de la Secretaría de Cultura del gobierno de México, adscrito a los Centros INAH Durango y Sonora, y a la Escuela de Antropología e Historia del Norte de México (EAHNM), así como del Laboratorio de Antropología y Odontología Forense de la Universidad Nacional Autónoma de México, en el lugar se hallaron los restos de ocho adultos, cuyas edades al momento de su muerte rondaban los 30 a los 40 años, y ocho niños, de entre uno y siete años.
Si bien la mayoría de los esqueletos estaban fragmentados y sin articular, tres de los adultos se encontraron en buen estado de conservación, en posición sedente (sentados), y con el cráneo orientado al oriente; al menos, uno de ellos tenía evidencia de haber sido cubierto con enjarre al momento de su deposición.
Deformaron sus cabezas en figura de «corazón»
En los cráneos de dos de los individuos se observó modificación del tipo tabular erecta bilobada; esto quiere decir, que deformaron intencionalmente sus cabezas en forma de “corazón”, un dato que hasta ahora no se había reportado en el sitio.
Entierro pudo ser para hacer el lugar sagrado y «custoriarlo»
Al tratarse de un contexto funerario múltiple vinculado a un espacio público, se han propuesto dos hipótesis: es posible que los entierros se emplearon para sacralizar el lugar, o bien, para custodiarlo, al haberse colocado como parte de los cimientos de la plaza, bajo el firme de piedra. En este sentido, y por asociación con la arquitectura del espacio donde se hallaron se estima que la antigüedad de estos oscila entre los años 600-950 D.C.
Así es la zona arqueológica donde los encontraron
La Casa Colorada se ubica en el área nuclear de La Ferrería, en la parte alta del sitio, y tiene una extensión de 600 metros cuadrados. Se integra por nueve estructuras de planta rectangular dispuestas en torno a una plaza. En otras temporadas de campo se han encontrado diversas inhumaciones en el interior de las edificaciones, por lo que se considera que fue un espacio dedicado a los muertos, sin embargo, hasta antes de este descubrimiento, no se tenía registro de un entierro colectivo en el exterior.
El hallazgo es resultado del Proyecto de Investigación Integral de la Zona Arqueológica de La Ferrería, dirigido por Cinthya Isabel Vidal Aldana, adscrita al Centro INAH Durango. La exploración del contexto funerario comenzó en 2021 y se reanudó en 2023, con el apoyo de un equipo integrado por personal del Centro INAH Durango y profesores y estudiantes de las licenciaturas de Arqueología y Antropología Física de la EAHNM, quienes realizaron sus prácticas de campo en La Ferrería con autorización del Consejo de Arqueología.
La Ferrería fue habitada entre 600-1350 D.C. Se trata de uno de los sitios monumentales más importantes de Durango y la única zona arqueológica abierta al público en la entidad. La cronología del conjunto arquitectónico Casa Colorada corresponde al periodo 600-950 D.C.
¿Dónde se encuenta?
La zona Se localiza a 7 km al sur de la ciudad de Durango y tiene un horario de visita de martes a domingo de 9:00 a 5:00 de la tarde. El útimo acceso es a las 4:00 de la tarde y su aforo máximo es de 50 personas simultáneamente.
El costo de la entrada es de 70 pesos y dentro de las prohibiciones en el lugar está no fumar, no ingresar con alimentos y no hay acceso a mascotas.
El lugar se encuentra a tan solo 20 minutos de la capital de Durango, y se puede tomar la carretera federal rumbo a Lerdo de Tejada-La Ferrería.