Mujeres cerveceras de distintos territorios, incluido el oaxaqueño, se reunieron para cocinar una cerveza de edición especial: Impetuosa, con la intención de colaborar con asociaciones civiles dedicadas a la atención de mujeres que viven violencia.
Se trata de una cerveza estilo “english porter”, con 4.6% de porcentaje de alcohol, cuyo sabor tiene tonos de caramelo y granos tostados.
Las ganancias serán destinadas a Hogar Comunitario Yach’il Antzetic, A. C., dedicado a acompañar a mujeres indígenas que viven violencia de género y embarazos no planeados, así como a Mujeres Libres Colem, A. C., dedicada a atender y analizar la violencia estructural feminicida.
Movidas por la sororidad, tres iniciativas cerveceras oaxaqueñas se sumaron al movimiento: Cervecería La Juquileña, Boca de Borracha y Capucha, éstas dos últimas, pensadas desde la perspectiva feminista.
Foto: Christian Jiménez
Las cerveceras oaxaqueñas Nayhiely, María y Fernanda detallan que éste es el segundo año en el que se realiza el proyecto Impetuosa.
En su intervención, Nayhiely, creadora de La Juquileña y Boca de Borracha, mujeres que forman parte de la Cervecería Colima, emitieron la convocatoria para participar.
La convocatoria, detalla, surgió en el marco del 8M, desde el año pasado; no obstante, en este año, la respuesta fue tal que se instalaron seis sedes para que las mujeres cocinaran cerveza.
Reunidas en Colima, Querétaro, Monterrey, Morelia, San Cristóbal de las Casas y Ciudad Juárez, 120 mujeres de 50 cervecerías y cuatro colectivos se reunieron con la intensión de hacer cerveza.
Las productoras oaxaqueñas viajaron a Chiapas para colaborar con la iniciativa, mientras que cada sede eligió a dos organizaciones para destinar las ganancias que se obtengan con la venta de la cerveza.
María explica que la materia prima se obtuvo a través de donativos, mientras que las mujeres que participan en el proyecto donaron la mano de obra, así como el costo de su estancia y traslado a cada sede.
Además, detalla, se estableció un costo unitario de 50 pesos por cerveza; monto al que se suma el costo del traslado desde las sedes a los distintos estados que participaron, entre ellos, Oaxaca.
Foto: Christian Jiménez
Impetuosa no solamente está pensada para visibilizar la presencia de las mujeres productoras de cerveza en la industria, sino también pone la lupa en el problema de la violencia que atraviesa la vida de las mujeres en distintos contextos.
Además, las productoras reconocen la importancia de proyectos como Impetuosa, que suman a organizaciones dedicadas a la atención de mujeres, sobre todo porque la pandemia por Covid-19 ha agudizado la violencia contra las mujeres en todas sus variantes.
Por esa razón, apunta María, el proceso de participar en la elaboración de Impetuosa ha sido empoderante para ellas.
“Conocer a otras mujeres que se dedican a la elaboración de cerveza nos ha permitido aprender de todas ellas; colaborar con ellas para hacer cerveza es un momento de compartir saberes y de aprendizaje colectivo”, destaca María.
“Tenemos dos luchas: una desde donde estamos y otra de lo que queremos hacer. Así es el camino de la cerveza; por no ser un producto propio de una región, como en Oaxaca lo es el mezcal, luchamos para aprender, para posicionarnos con nuestros propios saberes y conocimientos en la industria. También una lucha hacia afuera por consolidar nuestros proyectos”, agrega Nayhiely.
Por su parte, Fernanda detalla que el abrirse camino en la industria cervecera ha significado perseverancia y entrega para lograr la consolidación de la marca.
“Nuestro trabajo no se reconoce y tampoco es bien remunerado. Es importante para nosotras evidenciar el trabajo de las productoras, sobre todo en estos tiempos cuando pareciera que el trabajo de la producción es de las grandes élites, pero en muchas realidades, no es así”, indica Fernanda.
Para probar la “Impetuosa” y contribuir a la causa, las cerveceras oaxaqueñas recomiendan buscar las páginas de “Capucha”, la “Juquileña” y “Boca de Borracha” para poder adquirir el producto generado por la unión de mujeres.