El alza de las aguas de al menos 90 ríos por encima del nivel de peligro y el desborde de 24 de ellos amenazaba con inundar una enorme franja del noreste de China, informó la prensa estatal el martes.
Las cuadrillas estaban en alerta para defender viviendas y tierras de cultivo en la cuenca de Songliao al norte de Beijing, que abarca 1.2 millones de kilómetros cuadrados (482 mil 200 millas cuadradas).
La zona comprende partes de cuatro provincias y varias ciudades grandes, con una población total de casi 100 millones de habitantes. Decenas de miles de personas ya han sido evacuadas.
Se han vaciado parcialmente las represas y se han preparado las zonas de inundación. 10 ríos han superado sus niveles históricos, según los informes.
Buena parte de China padece un verano particularmente húmedo, con 142 muertos por inundaciones en julio y varias decenas más este mes.
En la ciudad occidental de Xi’an, un alud provocó 24 muertes el martes y tres personas estaban desaparecidas. Equipos de rescate con perros continuaban la búsqueda.
El alud y una inundación repentina el viernes dañaron una autopista y provocaron un apagón en 900 viviendas.
Las lluvias intensas y desbordes afectan partes de China todos los veranos, pero este año otras zonas y la misma capital se han visto afectadas. Esto fue producto de dos enormes tifones que también azotaron Japón y la península coreana.
Beijing evitó mayores daños al desviar las aguas a la provincia vecina de Hebei, lo que provocó la furia de los habitantes de la zona, que sufrieron graves daños en sus viviendas y cultivos.
Las inundaciones más letales y destructivas de la historia reciente se registraron en 1998, cuando murieron 4.150 personas, la mayoría en las márgenes del río Yangtsé, pero también de los ríos Nen y Songhua en la cuenca del Songliao.