Ante un aumento en las agresiones cometidas hacia los defensores de los derechos humanos, especialmente miembros de colectivos de búsqueda, la unidad de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha hecho un llamado a las autoridades, a fin de preservar la seguridad e integridad de las víctimas familiares de personas desaparecidas.
“Hay que frenar estos asesinatos. Su reiteración es una interpelación a realizar un riguroso análisis de las circunstancias y patrones que permita sin dilación a las autoridades federales y particularmente a las de Guanajuato adoptar medidas que brinden efectiva protección y resguardo a quienes demandan la satisfacción de sus legítimos derechos a reencontrarse con sus seres queridos y sancionar a los responsables de las desapariciones (…) La efectiva, pronta y diligente investigación del asesinato de Teresa Magueyal, con perspectiva de género, y el adecuado castigo a los autores es esencial para desalentar la comisión de semejantes conductas delictivas en Guanajuato y el resto del país”, enfatizó Jesús Peña Palacios, representante adjunto en México de ONU-DH.
A la par, el organismo dio a conocer que en tres años ha documentado desde 2020 hasta la fecha el asesinato de al menos cinco personas defensoras de derechos humanos que buscaban a sus familiares desaparecidos en Guanajuato: Teresa Magueyal, el 2 de mayo de 2023 en Celaya; María del Carmen Vázquez, el 6 de noviembre de 2022 en Abasolo; Jorge Ulises Cardona Zavala, el 27 de junio de 2022 en León; Francisco Javier Barajas Piña, el 29 de mayo de 2021 en Salvatierra; y María del Rosario Zavala Aguilar, el 14 de octubre de 2020 en León.
Considerando a estos hechos alarmantes, la ONU-DH hizo un exhorto a las autoridades con el objetivo de que brinden atención y protección integral a los familiares de Teresa Magueyal, y también a las demás personas y organizaciones de búsqueda de personas desaparecidas en el país.
Así mismo, condenó el asesinato de la madre buscadora de Celaya, refrendando su compromiso para trabajar con las víctimas y autoridades correspondientes, invitando a su vez a la sociedad en general a expresar su solidaridad y empatía hacia las madres buscadoras.
“Estremece recibir la noticia de otra madre buscadora asesinada en Guanajuato. Ni la desaparición de su hijo; ni los riesgos que enfrentó ella y sus compañeras en su exigencia de efectiva búsqueda, verdad y justica; ni su asesinato tenían que suceder. Se trata de un conjunto de agravios que nunca debieron haber ocurrido”, añade en su comunicado la ONU – DH.
Finalmente, recordó que las autoridades «tienen la obligación ineludible de garantizar la seguridad y protección de las víctimas que participan en procesos de búsqueda, y así fue desarrollado por dicho Comité en su informe de misión derivado de su visita oficial a México».