El papa Francisco pidió reformar la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que a la vista de la pandemia y del conflicto entre Rusia y Ucrania ha «demostrado sus límites», según extractos de un nuevo libro del pontífice del que el diario italiano La Stampa publicó.
El libro se titula «Les pido en nombre de Dios. Diez plegarias por un futuro de esperanza», y se publica en Italia este martes.
«Cuando hablamos de paz y de seguridad a nivel mundial, la primera organización en la que pensamos es Naciones Unidas, y en particular, su Consejo de Seguridad», afirma el papa argentino en su nuevo libro.
«La necesidad de estas reformas se ha puesto aún más de manifiesto después de la pandemia, en la que el actual sistema multilateral demostró todos sus límites. Con el reparto de las vacunas tuvimos un ejemplo palmario de que a veces la ley del más fuerte pesa más que la solidaridad», lamenta Francisco.
Por ello pide «reformas orgánicas, para que las organizaciones internacionales recuperen su vocación primordial de servir a la familia humana».
El sumo pontífice también se presentó como defensor de la «seguridad integral», que consiste en garantizar todos los derechos (económicos, sociales, a la alimentación, a la salud), y que deberían ser la brújula que guíe las decisiones de las instituciones internacionales.
AMLO regaña a la ONU
En noviembre de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que “nunca” en la historia de la ONU se ha hecho “algo realmente sustancial en beneficio de los pobres”, por lo que planteó la creación de un plan mundial de bienestar financiado por los más ricos del planeta para entregar un billón de dólares en becas y pensiones a 750 millones de necesitados.
Ante el Consejo de Seguridad, el mandatario también aprovechó para proponer que la ONU se reforme y salga de su letargo para combatir la corrupción y tener mayor protagonismo en la lucha contra la desigualdad, al tiempo que aseguró que el mecanismo de vacunas anticovid Covax fue “un doloroso y rotundo fracaso”.
Detalló que los recursos del plan propuesto pueden obtenerse de donaciones voluntarias de 4 por ciento de la riqueza de mil millonarios, una cantidad similar de mil corporaciones y 0.2 por ciento del producto interno bruto de los integrantes del G-20. Su idea es expandir los programas sociales mexicanos por todo el mundo.
“Nunca en la historia de esta organización se ha hecho algo realmente sustancial en beneficio de los pobres, pero nunca es tarde para hacer justicia. Hoy es tiempo de actuar contra la marginación atendiendo las causas y no solo las consecuencias”, manifestó.
Desde la sede de la ONU en Nueva York, también propuso que el organismo se reforme para tener mayor protagonismo en la lucha contra la corrupción.
“Es necesario que el más relevante organismo de la comunidad internacional despierte de su letargo y salga de la rutina, del formalismo, que se reforme y denuncie, combata la corrupción en el mundo, luche contra la desigualdad y el malestar social que cunden en el planeta con más decisión, profundidad, con más protagonismo, con más liderazgo”.