Las autoridades de Guerrero Grande, localidad del municipio de San Esteban Atatlahuca, hicieron un llamado a los gobiernos federal y estatal para que intervengan en la zona y que cese la violencia, luego del ataque armado contra una asamblea comunitaria el domingo pasado, en el que una mujer fue asesinada y siete personas fueron heridas con bala.
Mediante un escrito, también pidieron respeto a su autonomía y forma de elegir a sus autoridades conforme sus sistemas normativos internos y/o usos y costumbres.
Acusaron a la población vecina, Mier y Terán, de ser la responsable del clima de violencia y del ataque armado.
“Pedimos a las autoridades de Mier y Terán que respeten a nuestra comunidad ya que la violencia que ellos iniciaron ha causado muchos daños a la familia y a la familia de ellos mismos. Ya que no es el camino para encontrar la paz entre ambas comunidades y estamos seguros que ellos lo saben de lo que están haciendo”, expresan en el comunicado.
Las autoridades de Guerrero Grande denunciaron que la organización Frente de Resistencia Indígena, originaria del municipio de Santiago Juxtlahuaca, de estar detrás de la comunidad Mier y Terán de los hechos violentos ocurridos el pasado 1 de agosto de 2021.
Esta organización, aseguró, ha interferido en la autonomía de su comunidad como pueblo indígena al pretender intervenir en la elección de sus autoridades, en sus reuniones y en sus asuntos internos.
Las autoridades locales afirmaron que el agente de Mier y Terán junto con sus vecinos, llegaron a Guerrero Grande en enero de 2020 con armas de fuego, con el fin de violentar su autonomía, robando dinero, radios de comunicación, llaves de la agencia e incluso el vehículo oficial.
Recordó que en ese momento los atacantes despojaron a la comunidad de todos sus espacios públicos “para instalar su base paramilitar en conjunto con grupos pequeños de personas que están perfectamente identificados y que se autonombraron autoridad lo cual fue impugnado en los tribunales”.
Aseguraron que hay resoluciones judiciales, pero que la comunidad de Mier y Terán pretende despojarlos de sus tierras por la fuerza, “han intentado mantener el poder, privando de la libertad a los ciudadanos de la comunidad, amenazando con matar a los que no están a su favor. De ahí que el pasado 1 de agosto se registró un ataque armado en contra de la población dejando una víctima mortal”.
Exigieron a la Fiscalía de Oaxaca el esclarecimiento del ataque armado del pasado 1 de agosto durante su asamblea para elegir a sus autoridades para el periodo del año 2022, en el que una mujer fue asesinada y siete personas heridas, así como castigo a los autores intelectuales y materiales de la agresión armada.
“Desde este momento hacemos responsable a las autoridades competentes de hacer caso omiso de resolver este problema y que hasta ahora ha corrido sangre, me refiero a los tres niveles de gobierno”, señalaron las autoridades de Guerrero Grande.