La asamblea comunitaria de San Mateo del Mar, comunidad ikoots del Istmo de Tehuantepec, eligió a Rosa Inelia Valle Infanzón como presidenta municipal suplente, después del desconocimiento y revocación del mandato del edil Bernardino Ponce Hinojosa.
La asamblea en donde el Consejo Municipal validó el nombramiento de las nuevas autoridades que integran el Consejo Ikoots de Administración Municipal se llevó a cabo el 19 de abril. Dicho concejo se encargará del gobierno en San Mateo del Mar hasta el 31 de diciembre del 2022, por lo que ahora sólo queda esperar que la decisión sea validada por el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (IEEPCO).
Además de Rosa Inela Valle Infanzon, se eligieron a cuatro mujeres más para integrar el consejo como titulares en la Regiduría de Educación y como suplentes en la Regiduría de Cultura, Regiduría de Vialidad y Transporte. En total son cinco las mujeres que integran el Consejo Ikoots de Administración Municipal, frente un total de 25 hombres que ocupan las titularidades y suplencias de las regidurías.
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La importancia de nombrar por primera vez a una mujer como presidenta suplente es considerado histórico en esta comunidad ikoots, debido a que por muchos años en San Mateo del Mar las mujeres no pudieron votar ni ser votadas por un cargo público dentro de su Sistema de Usos y Costumbres.
Fue hasta hace 15 años cuando comenzó a permitirse la participación política de las mujeres, quienes poco a poco han estado ganando más espacios, aunque es mucho lo que falta para lograr la equidad en este municipio del Istmo de Tehuantepec.
Por su parte Bernardino Ponce, el presidente municipal destituido no aceptó la decisión que tomó el pueblo en 16 asambleas e informó que recurrirá al Tribunal Electoral del Estado de Oaxaca (TEEO) para defender su mandato por los tres años que fue electo.
El pueblo de San Mateo del Mar dio por terminado de manera anticipada el mandato de las autoridades del ayuntamiento por el abandono en que se encontraba el municipio y la inestabilidad social a la que se había llegado ante la confrontación entre los seguidores de Bernardino Ponce y los de la asamblea del pueblo que los desconocían, conflicto político-electoral que llevó a la masacre de 15 personas en junio de 2020.