La Comandancia General del Ejército Popular Revolucionario (EPR) afirmó que los responsables de la desaparición forzada de los dos miembros de su organización, Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya, realizaron una llamada desde el teléfono de Edmundo Reyes y que incluso lo mantuvieron activo varios meses después.
En un comunicado, el grupo guerrillero detalló que el 25 de mayo de 2007 entre las 6:00 y las 6:30 horas ambos fueron detenidos. Una comisión del EPR los dejó a ambos en el Jardín Madero de la ciudad de Oaxaca a las 6:00 horas, dato que confirmaron por la llamada efectuada por Gabriel Cruz entre las 6:00 y 6:05 horas, y por la llamada no recibida por este mismo a las 6:30 horas.
Además, la organización sostuvo que los dos militantes estaban desarmados al momento de su detención.
Una de las pruebas de que fueron víctimas de detención arbitraria y desaparición forzada, afirmó el grupo guerrillero, es que sus captores realizaron una llamada desde el teléfono de Edmundo Reyes a la 7:53 horas, y ese mismo teléfono lo mantuvieron activo por varios meses.
Otra prueba, señalaron, es que el mismo día ocurrió la detención arbitraria y tortura de Daniel Santiago Matías, activista indígena de la región Loxicha, de cuyo interrogatorio y tortura acusan al exdirector de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), Daniel Camarena Flores, quien desde 2020 recibió auto de formal prisión junto con otros dos mandos y cuatro agentes, por la desaparición forzada de Gabriel y Edmundo.
Los interrogatorios, afirmó, “se centraron en que confirmara que Edmundo Reyes Amaya era el comandante Zapata y que proporcionara información de quién era el otro detenido, ambos se encontraban en pésimas condiciones producto de la tortura”.
Y finalmente, dijo, un tercer elemento que prueba que fueron víctimas de desaparición es que Gabriel Cruz no pasó “al buzón en la ciudad de Oaxaca en el cual debía recoger artículos personales y material de trabajo revolucionario a las 07:00 horas”.
“Los perpetradores de este crimen pertenecen a la estructura contrainsurgente que desde los años 60’s del siglo pasado planifica y ejecuta los crímenes de lesa humanidad por motivos políticos; los diferentes grupos policíaco militares de contrainsurgencia siempre han estado bajo el mando centralizado del ejército mexicano, cadena de mando que conduce hasta el Jefe Supremo de las fuerzas armadas, es decir, el jefe del Ejecutivo federal”, señaló el grupo guerrillero.
“Los agentes de Estado que perpetran las desapariciones forzadas en México gozan de completa inmunidad, el hecho revela que la desaparición forzada de personas es política de gobierno de carácter transexenal, la magnitud del crimen y la sevicia de los victimarios”, afirmó.
Asimismo, reclamó que sus compañeros Gabriel Cruz y Edmundo Reyes llevan 15 años en condición de desaparición forzada, “tiempo en que el Estado primero negó el crimen, luego criminalizó a quienes exigían su presentación con vida; en lugar de presentarlos se ha dedicado a enturbiar y distorsionar el caso para tratar de diluir su responsabilidad en el cometido del crimen”.
Finalmente, exigió la presentación con vida de Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya; juicio y castigo a los responsables materiales e intelectuales y el desmantelamiento de “la estructura policíaca militar contrainsurgente”.
En días pasados, un juez federal ordenó la captura de Evencio Nicolás Martínez Ramírez, exprocurador de Justicia del Estado de Oaxaca, prófugo de la justicia, por su presunta responsabilidad en la desaparición forzada de los dos guerrilleros del EPR.