“La universidad es respetuosa de los juicios o de las demandas que hacen los compañeros. Lo que se hace en estos casos es turnarlo con el abogado para el estudio correspondiente”, afirmó el rector de la Universidad Autónoma Benito Juárez (UABJO), Cristian Carreño.
Lo anterior luego de que el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa con sede en Oaxaca concedió un amparo a favor de un estudiante indígena y de escasos recursos, quien no pudo pagar la inscripción de 10 mil 317 pesos establecida por la Rectoría como cuota obligatoria para ingresar a la Facultad de Contaduría y Administración de la UABJO.
El tribunal señaló que al tratarse de una universidad pública, los costos de inscripción deben ser gratuitos y ordenó a la UABJO devolver pagos anteriores hechos por el estudiante.
Al respecto, el rector puntualizó que esta no es la primera vez que un estudiante se ampara por no poder cubrir las cuotas que establece la universidad. “Lo importante es hacer ver que la universidad en este momento requiere de recursos extraordinarios para enfrentar estas situaciones”.
Carreño planteó la posibilidad de que el presupuesto que se asigna a la universidad se incremente paulatinamente, para poder financiar estos gastos: “Lo que ordenen y dicten los jueces, lo atenderemos”, dijo.
De acuerdo con datos del Plan Institucional de Desarrollo, alrededor de 60% de la matrícula de la UABJO se reconoce como indígena. “Somos una universidad indígena y ante ello elaboramos proyectos que dignifican a todas y todos los universitarios”, añadió.
Admitió que el “paripass”, es decir, el convenio de colaboración que la UABJO mantiene con los gobiernos estatal y federal para erogar los gastos, no es equitativo con respecto a los ingresos. “El subsidio que nosotros recibimos es mínimo, pero en la universidad se estableció un plan de austeridad que nos ha servido para descontracturar la economía universitaria”.
Actualmente, la UABJO enfrenta un déficit de 539 millones de pesos, deuda para la que el plan de austeridad ha sido útil.