Ivón Jiménez Camacho, de 20 años de edad, fue privada de su libertad, violentada y asesinada por Kevin M., quien fuera su novio; el cuerpo de la joven fue encontrado el 4 de agosto de 2013 en inmediaciones de San Pablo, Etla.
La joven estudiaba Diseño de Modas en la Escuela Libre de Arte de Oaxaca. Cuando desapareció, había salido para encontrarse con su entonces novio, con quien había terminado recientemente una relación de tres años.
Fue localizada el 6 de agosto en un terreno baldío ubicado por el camino a Santa Rita, en Etla. Tenía marcas de golpes severos en el rostro, además no tenía las uñas completas.
Su familia solicitó estudios de ADN a las autoridades de los restos en sus uñas, para rectificar la identidad del atacante, pero éstos nunca fueron entregados.
Desde entonces, el caso de Ivón permanece archivado.
A 10 años del feminicidio de Ivón, su familia se manifestó este día para exigir justicia y denunció la serie de irregularidades y negligencias en el caso, en el que acusaron que las autoridades protegen al presunto responsable, por ser hijo de trabajadores del Poder Judicial del Estado.
En inmediaciones del Templo de Santo Domingo de Guzmán, Elvira Camacho, madre de Ivón, exigió a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) acciones para la captura del señalado como responsable de la muerte de su hija, quien tiene una década prófugo.
Asimismo, denunció que desde que comenzó el proceso de investigación sobre la muerte de su hija, ella, una de las víctimas indirectas del feminicidio, ha recibido amenazas y ha sido intimidada e incluso la entonces Procuraduría General de la República (PGR) intentó detenerla.
«Pero no tengo miedo. Y si algún día me llegan o nos llegan a matar, vamos a morir luchando», dijo.