Visiblemente emocionada, Lila Downs se alista para volver a presentarse en Oaxaca, su tierra, tras dos años en los que la pandemia le impidió pisar el escenario del Auditorio Guelaguetza, recinto que para la cantante oaxaqueña y estadounidense está cargado de una energía especial, que le da balance y alegría.
A unos minutos de cantar ante más de 12 mil espectadores en lo alto del Cerro del Fortín, Lila se dice honrada por formar parte de la fiesta más grande de Oaxaca. Pero también se declara consciente de lo que significa su música y el mensaje que con ella comparte, tanto como una expresión artística como siendo un vehículo para la protesta y la lucha.
Y es por ello, asegura, que como artista siempre debe apostar por “mirar de frente a la verdad y a la justicia”.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la también antropóloga hace un llamado a la reflexión para que los visitantes entiendan los distintos niveles que implica la filosofía de la Guelaguetza entre los pueblos originarios: la de compartir, que a partir de una naturaleza ritual exige respeto para quien forma parte de ella.
¿Lila, qué representa para ti volver a Oaxaca tras este silencio de dos años ?
—Es un honor y una alegría venir a la tierra de uno y sentirse querida por la música, por las cosas que uno dice en sus canciones, es agradable y emocionante. No hay como este auditorio para hacer canciones como las que hacemos.
¿Y qué representa formar parte de la Guelaguetza?
—Lo que necesita saber mucha gente sobre nuestra tierra y nuestras comunidades es que hay un respeto a la gueza, por la filosofía de la gueza, que es el intercambio (…) algo que da un balance en la vida, y eso sí podemos decirlo en canción, en arte, en cultura. A quien no entiende qué es la Guelaguetza le digo que venga a conocer, que experimente de viva persona, porque muchas de esas personas nunca han estado en esta fiesta.
¿Eres de la idea de que Oaxaca está de moda?
—Siempre en las modas hay unas propositivas y hay otras que no, en esto de que Oaxaca esta de moda hay que preguntarse por qué. Hay muchos niveles de entendimiento y de cultura. Lo que yo creo es que la gente es atraída por lo que se ofrece en nuestra tierra. Sólo así vamos logrando que mucha gente entienda por qué Oaxaca está de moda.
Foto: Fernando Mirana
¿Qué le dirías a visitantes que se sienten atraídos a venir al estado?
—Quiero decirles que Oaxaca es ritual y al ritual siempre se le da respeto, no se debe hablar de manera light de ello. Eso es lo principal que debemos decir a la gente que viene de fuera a conocer nuestro estado, que a Oaxaca se le debe dar respeto.
¿Cómo se da este respeto a la ritualidad de Oaxaca?
—Yo, junto con mi madre y mi familia, venimos de una comunidad mixteca, de una de las regiones más humildes y accidentadas de nuestro estado. Es un lugar donde hay mucha ceremonia. En estos momentos de fiesta estamos de nuevo volviendo a la vida, pero siempre con reflexión. Sí, es una fiesta, porque es [parte de] la naturaleza humana celebrar la vida, pero también es momento de reflexión.
La saxofonista Elena Ríos, que viene de realizar una protesta en este espacio, te acompañará en este concierto. ¿Es parte de esta reflexión en la que la fiesta también es protesta?
—Conjuntar protesta y fiesta es parte de la naturaleza humana, todos traemos esa esencia de mirar de frente, en tu gremio y en el mío también, desde el arte, y como oaxaqueña, siempre estoy buscando la verdad y la justicia, es parte de mi esencia.
María Elena es un símbolo, hay que respetar eso, es un símbolo que nos representa a todas las mujeres que hemos sido violentadas. No hay que caer en la confusión, de cuestionar por qué se le da tanta atención a esta joven. Ella representa a una persona que luchó en contra del agresor y logró mucho. Y hay que apoyar este esfuerzo.
¿Lila Downs se define como feminista?
—Claro, yo soy producto de mi generación y como tal aún cargo con muchas cosas que en mi generación no se podían decir de cierta manera, pero ahora ya estamos viviendo otro momento y soy muy feliz de verlo.
Lo que viene
Lila Downs explica las sorpresas que sus seguidores tendrán en esta presentación y cuenta sobre los invitados especiales que la acompañan en su regreso al Cerro del Fortín, incluidos algunos con los que ha trabajado desde hace 20 años, como la Banda La Misteriosa, originaria de Oaxaca, y con la cual ha colaborado en distintas ocasiones a lo largo de años.
También adelanta que ya prepara nuevas canciones de estudio, enfocadas en la música regional mexicana, pero con la autoría de nuevos talentos.
“Estamos trabajando ya nuevas canciones, de musica regional mexicana, con obras de compositores jóvenes y trabajando con canciones mías, de mi autoría, estamos en eso”, afirma cuando se le pregunta sobre lo que viene en su carrera.
¿Cómo se define Lila Downs a sí misma?
—Humilde, orgullosa, valiente, como siempre lo he sido y lo seguiré siendo.
¿Y cómo describe a Oaxaca?
—Oaxaca es grande es ritual y es sagrada— finaliza.