A Tigres no le salió nada. Si bien tuvieron un poco de fortuna al final con el gol de Gignac, Sebastián Córdova los regresó a su realidad. Ahora, deberán ganarle sí o sí al Atlas en la última fecha y ver qué pasará con Pumas, Cruz Azul y Monterrey. Para Ricardo Ferretti, el encuentro de sus pupilos no fue el correcto, aunque no quiso hacer un análisis profundo de lo que sucedió en el césped del estadio Azteca.
“No dimos un buen partido y no jugamos al nivel que deberíamos de jugar ante el América. El partido de hoy no fue lo que esperábamos. Naturalmente, el resultado es justo por lo que hizo el rival y lo que dejamos de hacer”, dijo.
Pese a lo grave que puede ser la situación de sacar veladores y calculadores para una de las plantillas más caras del futbol mexicano, el “Tuca” apagó incendios. Manifestó que todos deben tener la cabeza fría y pensar con claridad de cara al desenlace de la fase regular del Guard1anes 2020.
“Antes de comentar algo específico, debo hablar primero con los jugadores para puntualizar las cosas. Cuando se pierde, hay muchas cosas negativas, pero mi forma de pensar es ver lo que puedo rescatar de un encuentro como hoy, aunque no haya mucho. Debemos mantener la cabeza fría. Aún falta un partido y eso definirá muchas cosas”, mencionó.
Bajo la misma línea, Ricardo Ferretti dejó ver que no era momento de reclamos ni de señalamientos por lo que dejaron de hacer ante el América. Compartió que será en los próximos días cuando analizarán a profundidad el duelo ante las Águilas y planificará su último partido en casa, frente el Atlas, por la jornada 17.
“Después de perder un partido el ánimo no es agradable. Sería ilógico y no me gustaría ver que estamos contentos. El ánimo no es el adecuado, pero mañana volveremos a pensar las cosas, platicaremos y prepararemos el siguiente cotejo”, añadió.
El “Tuca” insistió en el hecho de ver el vaso medio lleno y no medio vacío. Para él, no hay fundamentos para pensar que Tigres está en una mala racha, una crisis o un bache. Se mostró confiado en poder conseguir el boleto a los cuartos de final en su último compromiso.
“Siempre ando preocupado, nunca dejo de preocuparme, ni cuando gano. Cuando se pierde, todavía más. No creo que el equipo tenga motivo para entrar en un bache. Es un grupo que ya pasó épocas complicadas. Confío en el equipo”, cerró.
Los de Nuevo León deberán medirse a los Rojinegros del Atlas en la última fecha. Pese a que no dependen de ellos, sólo una victoria los haría soñar.
Esta nota originalmente se publicó en El Sol de México